jueves, 18 de septiembre de 2014

Tu

Tu veneno es genuino, sin duda.  Tu figura, autoritaria, disfrazada de cordero, bautizado por chamanes de embuste, con pendientes de cuarzo inmerecidas, que te dirigen al abismo, sin duda.  Vives en palacio, con lujos y centellas, rodeado de mares tempestuosos y ninfas perdidas.  Tienes familia pero eres de ti y de mas nadie, asi siempre ha  sido y sera.  Das para ser tuyo, para ganarte el cielo inmerecido, ese que no llega, que resistes, al que le tienes miedo, por tu ego, por ser de ti y de mas nadie.  Solo tu disfrutas, solo en tu palacio, de ninfas perdidas y viajes ocultos.  Tu, sumergido en veneno blanco, de cuarzo inmerecido y visitas a chamanes de embuste.  Aquel, que viva jodido, que importa, que viva jodido, , quien lo manda, que lo proteja la Virgen si existe, y tu  con el cuarzo  y chamanes de embuste, viviendo la vida, rodeado de chamanes de embuste y ninfas perdidas, lo tienes todo y nada, tu ego, tu veneno blanco, que te lleva al abismo, sin tu quererlo, sin rumbo fijo, rodeado de ti y de mas nadie. Tu.

miércoles, 17 de septiembre de 2014

Santa Madre

Le pido a la Santa Madre.  A esa con mirada fija, uniforme, prima de la Mona Lisa, esa Santa Madre que esta presente en todo.  Le pido que me serene, que me obsequie algo, que me quite esta lentitud perenne, que me atrasa, que me lleva a buscar en lados inoportunos y equivocos.  Esa Santa Madre que se apiada de mi locura paciente, esa locura que quiere atraerme a ella, a esa, a la india maldita y bonita, de caderas que bailan y resbalan, con la sonrisa y mirada de la Mona Lisa, que me enciende y me lleva corriendo a la Santa Madre, para que me calme, que calme ese animal perdido, sigiloso, que duerme y se despierta, que se enmudece en ciclos sicoticos y de aventura, en la noche tranquila, de luna grande y transparente.  Santa Madre, hazme caso, pero no tanto, tenme presente a veces, cuando la locura se disipa y estoy en tu real presencia.