martes, 28 de febrero de 2017
Hunza y su amuleto
Hunza afilo sus puñales, llevaba tres de los siete. Estaría en una batalla campal contra los beduinos aterciopelados. Estos tenían cara de serpiente y eran diestros tirando flechas con veneno. Hunza llevaba su escudo morado para cubrirse de las flechas. Llevaba en su bolsillo un caracol color perla, uno de sus amuletos de buena suerte.
Energia vital
Hunza se sienta, tranquilo, con energía vital que entiende y no entiende. Es una energía vibrante, que atrae al débil de la calle. Hunza emana energía vital, que entiende y no entiende.
Playa
Camino por una playa desierta. Es una playa suave, con unas huellas casi invisibles. Es una playa de arena de seda, granulada blanca, con caracoles triturados que la interlazan.
lunes, 27 de febrero de 2017
Hogar
Llego a mi hogar. Uno que no son solo paredes. El hogar se crea con el aura, con las vibraciones, con el silencio, con la humildad, con el agradecimiento.
Inmenso
Se sentó a oír el gallo a la distancia. El viento soplaba ligero, y rozaba su mente. Era un momento corto pero inmenso.
domingo, 26 de febrero de 2017
Hunza y la soledad
Hunza llevaba 4 años solo y en silencio. Exploraba laberintos y se encontraba personas en el camino. Eran 4 años extraños, de claridad y confusion. De crecimiento. En el fondo, a Hunza no le gustaba la soledad, solo convivía con ella.
sábado, 25 de febrero de 2017
Nada
Eran casi las 12 de la media noche. Me fui convirtiendo en soldado de slmas, guerrillero perpetuo, ensalzando nada
Ley de la vida
Sin duda, era un reto. Descifrar, entender, peeseverar, luchar. No había tregua, la motivacion a veces escaseaba. Pero esa era la Ley de la vida
Hunza y los angeles
Hunza cerro los ojos. Se dejo llevar por los Ángeles negros y blancos. Eran unos angeles benignos, compasivos. Los Angeles derramaron paz sobre Hunza. Hunza despertó sin saber que había pasado.
A su modo
Hace tiempo conozco s Jesus. Hace poco conozco a Hare Krishna. Ambos me salvaron a su modo
Silencio
Silencio absorbente, necesario, diluido, pacifico, calido, magnético, real, magico, callado.
Silencio puro
Se canso de los rituales, de las conversaciones amenas, del Dios te bendiga, de los ateos, de los sabios. Y prefirió el silencio puro y ya
Condena y bendicion
Su madre era loca y pasional en el amor y poetisa. Así murió y asi revivió. Y el lo heredo. Su madre pensaba era una condena y al morir y revivir vio que era una bendición
Hunza y su mente clara
Hunza tenia su mente clara, no tenia vicios. Y eso lo llevaba a desconfiar y alejarse del mundo de los adultos
Me encierro
Son tantas épocas, tantas personalidades, tantas teorías, tantos patrones de comportamiento, tantos espacios, tantos disimulos, tantos silencios,,tantos hipócritas, tantas formas inverosímiles, que me encierro en mi mundo
Loco
Simplemente, era un loco, de esos locos brillantes, que no hallaba a la loca adecuada que lo acompañe
Hilvanando espacios
Era torpe, no sabia dar espacio. Era imprudente y a veces callado. y así se pasaba hilvanando espacios
Sin autoridad
Había días como hoy que estaba cansado. Cansado del ejercicio, de leer, de observar. Simplemente escribia sin rumbo, sin flecha direccional, sin autoridad de ningún tipo que me dirija
Hunza y el sendero
Hunza permanecia en silencio. Hoy estaba con hambre. Comio ensalada cruda, queso, frutas, pasta organica y una tajada de pan. No necesitaba imagenes foráneas, quizás un poco de musica. Su hijo y su hija lo acompañan hoy en ese sendero llamado vida
Tomarlas y. Calmarlas
Ella gesticulaba con sus manos,y el quería tomarlas. Ella mesia sus piernas, y el quería calmarlas
Hunza y Alana
Hunza y Alana se conocian poco en esta vida. Se reconocian, se habian amado en otras vidas. Alana tenía miedo, había sido herida por el temible Ubor y se sentía traicionada. Quería confiar en Hunza y le simpatizaba, pero era muy temprano y quizás Hunza era una ilusión o era también malvado. Hunza era bueno, y también había sido herido por una bruja disfrazada de bella princesa. Hunza era sensible y protegía su corazon con barrotes de acero.
Hunza y el silencio
Hunza se levanto de madrugada, a las 4 de la mañana. Medito, hizo silencio. Hizo yoga, mas silencio. Miro al mar, hizo silencio. Medito, hizo yoga, miro al mar, leyó un poco, hizo silencio
viernes, 24 de febrero de 2017
Magia instantánea
El palpo su belleza mientras ella caminaba hacia a el. Y su abrazo, fue magia instantea
Nuevamente
Es un mundo de amor, lealtad y comprension. Ese fue el mundo que le ofreció a ella en otras vidas. Y es el mundo que nuevamente quería darle
Hunza y la claridad
Hunza buscaba la profundidad y así poder captar el azul del mar, el azul del cielo y el verde del bosque con mas claridad
Algo especial
Inicialmente solo pedía una oportunidad de hablarle y verla un rato. Pero sentia algo especial
Más difícil
Que es más difícil, jugar ajedrez, correr un maratón o evitar enamorarse de una bella mujer?
La ilusión
El se había enamorado de una mujer. Era alguien que le creo expectativas, una ilusion. Nunca tuvo una cita, y mucho menos la beso, aunque ansiaba hacerlo con todo su corazón. La veía a menudo y trato de conquistarla de una manera sobrehumana. Pero no pudo ser, eran seres distintos, y un día la vio con alguien. El se alejo, se olvido del amor, de la vida y de la esperanza. Y un día, de la nada, conocio a alguien que le hizo recordar nuevamente la ilusion
Sabían
Iban disimulando y fingiendo ante los testigos presenciales. Fingían ser normales y apegados a nadie. No podían crear sospechas y debían dejar el tiempo correr. Debían saber que habría algún pretendiente intruso, incisivo y no bienvenido en el camino. Sabían que habría duda y desconfianza en el camino. Sabían que se estaban conociendo y se caían bien. Sabían que los días se toman uno a la vez
87 vidas
Se había equivocado, no era aquella mujer sino esta, la presente. Esa mujer presente, la que había amado por 87 vidas pasadas
Luna y sol, sol y luna
Ella es una niña sol. Con sonrisa angelical y ojos picaros. El es una luna ambulante, analítico y soñador. El sol y la luna llenan su vida
La diosa de la piel blanca
El caminaba derrotado, sin animo. Un día visitó a la diosa de la piel blanca. Le hablo de ella, de una mujer. La diosa de la piel blanca escucho atenta mientras el describía a esa mujer. Ya la diosa conocia al hombre, conocia sus tristezas, sus alegrías, sus desamores, sus anhelos y su franqueza. La diosa de la piel blanca recomendó prudencia, recomendó que le diera espacio a esa mujer. El tomo el consejo y siguió su marcha con la convicción de luchar y vencer
Hunza
Hunza escribia muchas cartas. Era creativo. Le escribía a algunos solamente. Eran diversas cartas. De amor, de la existencia, de los hechizos, de la comedia, de lo desconocido. Hunza escribia y analizaba todo. Solo confiaba en su hijo y su hija, en sus dos perras salvajes y en sus 7 puñales. Hunza siempre buscaba a su amada raptada
Hunza, Alana y la cautela
Alana provenía de las flores, de un país mágico de flores. No habían caminos de asfalto sino de flores. Alana preparaba perfumes y brebajes para lus duendes del Himalaya occidental. Hunza había sido criado por lobos y cuervos. Alana había sido criada por golondrinas y lobas. Alana era mayormente silente, le gustaba comunicarse con las rosas amarillas y con los tulipanes. Hunza observaba a Alana, la observaba con cautela. Hunza era un guerrero y los guerreros proceden con cautela. Esto, ya que en el valle existían muchos hechizos y Hunza desconfiaba de todo
Poco a poco
El confiaba en muy pocos, había sido herido. Ella confiaba en muy pocos, había sido herida. Se conocían hace muy poco, aunque se conocían de otras vidas. Y comenzaban a confiar el uno del otro, poco a poco, sin prisa
Pais de los sueños
Mujer buena que conoce a hombre bueno y se enamoran. Quizás en el país de los sueños
Al diablo
Muchas veces se quitaba sus amuletos, sus cadenas, sus pulseras de piedras energéticas. Y tiraba todo al diablo
Hunza
Hunza quería ayudar a Alana. Hablar con ella. Pero Alana no quería hablar, estaba herida, molesta. Queria solo su espacio libre en el bosque de las flores
Hunza lucha
Hunza era evaluado, escudriñado, ignorado. Y ante ello percibia y sentía rabia. Pero era un guerrero y luchaba . Y asi moriría, luchando
Al carajo
Las que el deseaba eran inaccesibles por diversas razones. Y las que lo deseaban y perseguían el las mandaba al carajo
Suicidas
El era un suicida. Se enamoraba de las locas, de las heridas, de las desquiciadas, de las lejanas, de las confusas, de las casadas, de las antipáticas, de las suicidas, como el
Hunza, hombre de bien
Hunza podia ser agresivo y violento. Pero escogia no serlo. Usaba el auto control aprendido de sus maestros. Hunza era impaciente pero iba aprendiendo. Hunza era un hombre de bien
jueves, 23 de febrero de 2017
Profundidad de tu ser
Puedes tratar pero no te puedes obligar. Obligarte a ti mismo a hacer algo en contra de tu voluntad y felicidad atenta contra la profundidad de tu ser
Hunza es único
Hunza intento ser parte de la masa, pero le era imposible. Hunza era de pocos, de algunos selectos. Hunza ayudaba al necesitado pero su círculo de confianza era pequeño. Hunza defendía al oprimido. Hunza corria, comia mayormente crudo, le obsesionaba el chocolate oscuro y el yogur organico. Hunza amaba a sus hijos y esperaba por ella
Creci
Creci, cambie, modifique, retome, abandone, creci, cambie, retome, modifique, creci, cambie, retome, creci, modifique, retome, creci
Sal y agua
El ser sensible, el que verdaderamente siente, palpa la lagrima y la sonrisa por dentro, a la misma vez, y los ojos se le convierten en sal y agua
Hunza y el agua
Hunza gustaba del sgua helada del río, el agua tibia del mar y el agua caliente del baño
Hunza y lo que es
Hunza era síquico, sensorial, escurridizo y a veces solitario. Amaba la justicia, la libertad y la armonía
Gaviota
Érase una gaviota libre. Tenía su vuelo, su cielo, su mar, su viento, y quienes la miraban ser libre
miércoles, 22 de febrero de 2017
Hunza era
Hunza era potente, guerrero, determinado, pasional y audaz. También podía ser sensible, soñador, emotivo y vulnerable. Hunza era salvaje, honesto y repleto de bondad
Hombres sin mente
Hunza dormiría, buscando paz mental, ignorando a los salvajes hombres sin mente, esos que arreglan las cosas a la fuerza, sin tacto, sin sensibilidad humana.
Hunza duerme
Hunza dormia poco, observaba mucho, era envidiado por muchos hombres, deseado por muchas mujeres, admirado por muchos niños. Hunza a veces soñaba despierto, tenía que refrenar su pasión y su impetu. Hunza tenía sueño, el día anterior había dormido poco
Andar
Que somos en este andar constante? Somos hilos de seda, bambu, roble, olas, flor, luna y sol. Somos eso y eso determina nuestro andar
Abrazo entre el y ella
Se abrazaron por primera vez, y sintieron calor y calidez. Se despidieron ese día com otro abrazo, y fue igual
Hojas
La suave brisa acariciaba a las hojas mientras caían. En ese momento los pájaros vecinos eran testigos y hacían sonidos y cantos
Hunza reia
Hunza reía, Lao Sun lo había grabado con un artefacto extraño del mundo moderno realizando artes marciales. Hunza se veía, y se reia. Hablaba un idioma extraño, era parte de un mundo tecnológico ajeno a sus raíces del Himalaya. Hunza se veía, y se reía. Lao Sun se tele transportaba entre diversos mundos, entre el mundo guerrero primitivo y el mundo moderno tecnológico
Hunza es inducido al sueño
Hunza debía dormir, eran las 4 de la madrugada. Buscaría sosiego inducido por las brujas blancas del Norte, los duendes hechiceros de los Pirineos y su hada madrina. Su hada madrina había sido visitada hoy por Hunza. Era una mujer blanca de pelo negro y era muy sabia. Se llamaba Maixa. Maixa le había aconsejado ser feliz a Hunza. Le había aconsejado calma. Las brujas blancas del Norte, los duendes hechiceros de los Pirineos y Msixa conspirarían para inducir el sueño a Hunza. Hunza debía descansar
martes, 21 de febrero de 2017
Hunza y la madrugada
Hunza estaba despierto, era casi el amanecer. Comia pan tostado seco con mantequilla liviana y queso seco, algunas aceitunas silvestres, transitaba entre el placer, el sueño y la soledad sublime y de calma. Era un estado semi perfecto de no sentir la mente, de transitar entre estados de conciencia sin esfuerzo alguno. Hunza sentia mentes amigas cercanas, de diversos tipos y con diversos propósitos. Era la madrugada, el momento predilecto de Hunza
Manecillas
Eran unas manecillas de un reloj pequeño y oxidado. Y las manecillas del reloj del rey de esas manecillas se había enamorado
Lo ideal
La vida no tiene necesariamente un sentido que debamos entender. Tampoco estamos en la obligación de entender cada partícula de nuestro proceder y pensamiento. Pretender hacerlo sería un acto de injusticia hacia uno mismo. Lo ideal diria es vivir ese momento singular, presente y vivo. Lo ideal es dejar atrás ese pasado que ya no existe y no visualizar demasiado ese futuro venidero que aun es una ilusion
Hunza y los otros guerreros y guerreras
Hunza era realmente un hombre de paz, no un guerrero. Era Guerrero por necesidad, por las circunstancias. El pueblo Hunza habia sido oprimido y devastado y Hunza debía defenderlo. Hunza no estaba solo, habían otros seres de paz que también eran guerreros y guerreras
Hunza y la sintonia
Hunza corto papaya, era tarde ya, pero Hunza tenía hambre. No hambre violenta de comer animales y envenenar el cuerpo y el karma. Hunza se sentía vivo en la madrugada, entraba a un mundo mágico sin limites, un mundo de lo sensorial y lo telepático. Hunza podría no dormir hoy pero quizás convendría. Hunza pensaba cuantos guerreros y guerreras estaban despiertos en esta misma Sintonia
Hunza guarda
Ante la adversidad, Hunza guardaba varias cosas. Unos amigos leales, los refugios, el mar y la esperanza
Hunza, el hambre y el frío viento del mar
Ciertas noches, Hunza dormia poco, era mas lobo que hombre. Le aumentaba el hambre, pero estaba acostumbrado a ser vegetariano mayormente especialmente en la noche. Procuraba cocinar lo menos posible, comer alimentos crudos. Hunza hoy escuchaba la fuerza del viento, un viento frío e incesante. Hunza se refugiaba del frío viento que podría aniquilar hasta al mas fuerte guerrero. Hunza guardaba su paz, aun con hambre y frío
Hunza, la noche y el nuevo horizonte
Hunza escuchaba el viento potente del mar Indico, comio mas zetas blancas, comio otro trozo de queso seco. Tomo leche de soya organica, se acercó a la espesura de la noche. Ya Hunza conocia la noche y la madrugada, la soledad no le era extraña. Hunza sabia que pronto amanecería y abria un nuevo horizonte por descubrir
Hunza y el descanso
Hunza a veces no podía dormir fácilmente. Su energía era mucha, y el sueño no llegaba. Hunza debía tener paciencia, cerrar los ojos aun si no durmiese, quizás practicar meditación y pedir descanso a la energía universal
Hunza y Aubun se enfrentan
Hunza comio queso seco y zetas blancas. Necesitaba algo de energía y saciar su hambre previo al combate. Se pinto mándalas negras en su cuerpo con tinta de henna. Aubun utilizo opiatos alucinógenos y comio carne de venado. Hunza y Aubun eran muy distintos pero ambos eran guerreros temibles. Aubun utilizaba el sable chino y sus sortijas cortantes. Era experto en jujitsu. Hunza por su parte atacaba con golpes de codos y filos de la mano y patadas tailandesas. Se encontraron al amanecer en el centro de la costa del mar Indicó. Se saludaron sabiendo que uno podria morir en el combate ese día. Aubun ataco primero, hiriendo la mano izquierda de Hunza. Lo tiro al piso y forcejearon largo rato. Hunza era mas fuerte, y fue dominando. Aubun se fue debilitando, y los alucinógenos le nublaban su percepcion. Hunza había vencido y decidio no usar el puñal, perdonando la vida a Aubun. Solo le amarro las manos en señal de triunfo. Aubun agradecio el perdón de Hunza
Hunza y Aubun se preparan
Hunza vestia de negro en la guerra. Lo hacia en honor a los lobos y los cuervos. Solo sus 7 puñales eran de diversos colores, y solo llevaba uno a cada combate. El puñal que llevase lo determinaba la carta astral y sus reuniones son los sabios ancianos del pueblo Hunza. Por su parte, Aubun había sido criado por tigres y leopardos. Vestía de amarillo y rojo, en honor a los felinos salvajes. Pintaba su cabello de rubio con plantas. Aubun usaba sortijas en cada uno de sus siete dedos de cada mano. Cada sortija tenía un filo devastador. Aubun era un guerrero fiero y Hunza debía enfrentarlo con valentia
Hunza aprendia
Hunza aprendia poco a poco a confiar, a no sentir que eran guerras interminables. Hunza aprendia a visualizar que la felicidad no era una mera ilusión.
Mundo de la noche
Hay un mundo de la noche, que se nutre del viento, de las olas, de los grillos y de las estrellas
Hunza aprende de los lobos y los cuervos
Hunza fue enviado por su madre y su padre al mundo de los lobos y los cuervos. Fue enviado a
muy tierna edad, a los siete años. De los lobos, Hunza aprendió a trabajar en grupo, a buscar la presa sigilosamente y aprendió a hacer el amor viendo al lobo aparearse con la loba. De los lobos aprendió a absorber energía de la luna, y a correr largas distancias sin cansarse. De los lobos aprendió a aullar en la soledad de la noche. De los cuervos aprendió a ser frío, inmovil, preciso, si lo ameritase el momento. De los cuervos aprendió a mirar fijo, a sentarse a esperar con paciencia. Con los cuervos aprendió a volar libre y a apreciar la oscuridad y misterio de la noche. El padre y la madre de Hunza sabían que Hunza iba a ser un un hombre y un guerrero y por eso fue enviado a los lobos y los cuervos, para aprender de ellos
La musa
La musa lo atrapaba, no lo dejaba quieto. Impedía que se bañase de momento, a poco le permitía que comiese. Era una musa incisiva, que llegaba, se iba y volvia. Cuando se iba se bañaba y comia. Y luego volvia
Lluvia y la existencia
Llovía copiosamente, era una lluvia incesante, de esas lluvias majaderas y bellas. Llovía de repente, mientras mas llovía, mas entendía la existencis
Sol y luna
Mientras sentia los rayos del sol pensaba en la luna, y mientras me deleitsba mirando a la luna pensaba en el sol
Hunza y Autun
Hunza había partido nuevamente, estaba cerca del mar Indico, hacia brisa de un frío congelado. Hunza sentía nostalgia, extrañaba a sus hijos y a su amada raptada. Pero Hunza era un guerrero, tenía poco tiempo para sentir nostalgia. Un guerrero era fuerte, luchaba, sino seria derrotado fácilmente. Hunza escogió el puñal dorado y verde para este nuevo combate. Seria una guerra en la costa del mar Indico y el rival seria el Guerrero de las islas Samoa llamado Autun, quien tenía siete dedos en cada mano y un ojo en la parte posterior de su cabeza
Hunza buscaba
Hunza no buscaba riquezas materiales. Buscaba un mar cálido, un árbol frondoso, una llovizna, la niebla, un trueno, un arco iris, un zumbador, una gaviota, la sonrisa de sus hijos, un abrazo, la libertad, la música, el silencio
Hunza, sus padres, la soledad, y sus mentores
Hunza había llegado al refugio de su padre, el gran guerrero Olox. De Olox había aprendido el orgullo, la organización y la disciplina. La madre de Hunza se llamaba Sofix y estaba en un plano superior ya. De Sufix había aprendido la lucha, la libertad y la pasión. Hunza llevaba mucho tiempo en soledad, había rechazado mujeres y ciertas mujeres que pretendió estaban acompañadas. De la soledad Hunza aprendió lo que es el silencio y la paciencia. En la noche Hunza solo escribia y leía. Hunza era nocturno, como los lobos y los cuervos que eran sus mentores
Hunza y la luz verde sanadora
Hunza guardo silencio, comenzó a calmar nuevamente su mente. Eran muchas guerras vividas, y Hunza a veces perdía el discernimiento. Pero Hunza era sabio aunque su juventud estaba intacta. Hunza se retiraría pronto a su guarida luego de una sesión ardua de artes marciales. Comería papaya y melón rojo, tomaría leche organica, y agua alkalina. Hunza comenzaba a calmar su mente y a crear vibraciones positivas de luz verde sanadora
Puertas
En un mundo de intriga y de hipocrecia le habían cerrado mil puertas. Ahora abria las puertas con cautela
Locos de mente torcida
El pensaba que su mente estaba torcida y loca. Y veia y sentia cuan clara estaba su mente cuando hablaba con los locos de mente torcida
Complice
Se conocieron sin pretenderlo. Se encontraron sin buscsrse. La libertad fue el cómplice de ello
Placer correr
Ella se refugió en sus sabanas sin forma definida, revueltas. Olían a ella, ya el no estaba hace tiempo. Desenvaino su ropa interior, su suave mano palpo su suave interior. Escucho los ruidos, escucho el silencio, penso en algunos nombres, y dejó el placer correr
Diluir
Dejar libre a alguien, respetar su espacio, no forzar, diluir, extrañar. Abandonar si fuese necesario
lunes, 20 de febrero de 2017
Hunza y Lao Sun
Hunza visitó a Lao Sun, el mandarín. Lao Sun era experto en yoga y en el escogido idóneo de frutas, siendo su predilecta la papaya, conocida en su tierra como la fruta de la sabiduría y bienestar. Lao Sun enseñaba a Hunza asanas y destrezas de seduccion y de paz interna. Hunza por su parte le enseñaba a Lao Sun sobre la poesía y la improvisación. Hunza y Lao Sun se veían poco, pero se conocían ya de varias vidas pasadas
Mundo muy sutil
Entre ellos era un mundo sutil, de acabarse de conocer. Era un mundo perceptivo, de ganar confianza. Era un mundo sutil, intangible, repentino, muy sutil
Hunza se adentra en el bosque de las flores
Hunza había entrado al bosque de las flores. La guerra estaba en tregua, los rinocerontes del Himalaya central habian creado un trastoque donde no podía cruzarse la frontera para combatir. Irónico que la naturaleza hubiese provocado la tregua entre el pueblo Hunza y los salvajes Samalites de África central. Esa tregua había permitido que Hunza llegase al bosque de las flores. Hunza llevaba consigo lo necesario. Uno de sus siete puñales por si tuviese que defenderse de algún animal salvaje. Llevaba consigo el puñal rojo y verde. Llevaba albaricoques secos y queso deshidratado. Llevaba también variedad de semillas comestibles y algunas hojas verdes con aderezo de pimienta, frutas y miel. Hunza entraba sigiloso al bosque de las flores, en silencio absoluto, como lobo, como cuervo callado. Hunza intentaba divisar a Alana sin que se percatase. Alana era ermitaña, huía a la menor provocación
Hunza criado por lobos y cuervos
Hunza era instintivo. Se aproximaba a la mujer de una manera insistente y extraña. Hunza había sido criado por lobos y cuervos. Por eso era extraño
Alana y sus 9 puñales negros
Hunza había conocido a Alana. Ella no lo reconocia. Alana solo quería recoger flores. Hunza trataba de hablarle, de manera sigilosa. Alana no confiaba, era tambien Guerrera, dueña de 9 puñales negros
Hunza y sus dos hijos
Hunza parecía docil pero tenía la fuerza de diez hombres. Era salvaje pero sabio. Hunza era honesto y odiaba la traición de algun amigo. Hunza amaba a su hijo Kai y a su hija Sai. Ellos lo hacían reir
La puerta del silencio
Busco la llave de la puerta del silencio. La abrio y entro, nadie se entero. Dejo a todos afuera, hablando sin parar
Dos fósforos
Tenía algo de frio. Busque una frisa, dos fósforos, una fogata y siete velas. Los abrazos escaseaban
domingo, 19 de febrero de 2017
En turno
Puedes tener varios nombres en la mente, varios rostros. Pero en el fondo de tu mente sabes quien esta en turno
Pensaban
Habían jugado al escondite en el amor. Les habían traspasado el corazón varias veces. Habían llorado por otro. Se habían aislado del amor. Habían odiado al amor. Y pensaban si volver a arriesgarse
Silencio
La noche traía consigo un silencio espeso. Era un silencio sin rostro, un silencio suave y absorbente. La noche traía consigo un silencio de luna y misterio, un silencio energético y supremo
Supongo
Ella a veces guardaba un insólito silencio. Era un silencio que ya el conocia de otras. Pero cada silencio es distinto, supongo
Volver a empezar
Cuando pensé que me había realizado y que había logrado mis metas, tuve que volver a empezar
Pequeño mundo
Mundo de locos. Mundo de violentos. Mundo de fanáticos. Mundo de traicioneros. Mundo de insensibles. Mundo de olvidarse de ellos y trasladarme a mi pequeño mundo
Hunza y su profundidad
Hunza vivia en la profundidad de sus sueños, de su cordura, de su locura, de su silencio, de su lucha
Hunza, Alana y las flores
Hunza pensaba en Alana. Quería ayudarla a encontrar las flores que ella continuamente buscaba.
Alana y las flores
Alana vive apresurada, apresurada por recoger las flores del bosque. Pensaba que tenia que recogerlas todas. No sabia que con recoger tres rosas y dos girasoles era suficiente.
Hunza y las mujeres jóvenes
A Hunza le gustaban las mujeres jóvenes, libres, maduras, profundas, con hijos, solas. Hunza seria leal a una, de llegar a el
Hunza y las aguas heladas
Hunza los veia riendo, cantando y bailando. Hunza escuchaba los tambores y las voces cantando. Hunza hpermanecia inmovil, frío, como las aguas heladas del Himalaya
Capas profundas
Te diré un secreto. Para ver esas capas profundas debes hacer dos cosas. La primera, buscar el silencio. La segunda, despegarte de lo mundano
Hablar sin pensar
Esa histeria colectiva, acelerada, gente que no respira antes de hablar, cuyas mentes no paran de pensar.
Hunza sobrevivía
Hunza deambulaba, soslayado y maniatado. En estos días su cuerpo sufría de espasmos, había perdido mucha sal, mucho sodio. Comia papas secas con sal y mucha agua. Comia sandia y papaya. Comia guineo, comia chocolate oscuro. Los amigos de Hunza eran pocos, y sufrían de locura momentanea, habían sido hechizados por las brujas de Oriente. Los hijos de Hunza estaban en tierras lejanas, en playas paradisiacas. Hunza aun no sabia quien era su amada o donde estaba. Hunza tenía dos perras guerreras salvajes, y sus siete puñales intactos. Hunza vivia en una cultura extraña, de gente extraña. Hunza sobrevivía
Mano tirana
La división y paranoia de un pueblo. Un pueblo en busca de identidad, libre de la mano tirana
sábado, 18 de febrero de 2017
Feliz y en paz
Ella se despertaba de madrugada, era libre. Se acostaba placidamente otra vez. Poco a poco, comenzaba a sentirse feliz. A sentirse en paz
Hunza solo
Hunza llevaba años solo. Era nómada, Guerrero, vegetariano. Hunza vivia en silencio, alejado de las mentes perturbadas, añorando otro lugar para vivir. Hunza la buscaba a ella, hacia años que lo hacia. Hunza vivia solo hace años, acechado, atacado. Hunza la seguiria buscando a ella. Quizás la había encontrado pero aun no sabia
Paredes de mármol
Ya no tenía pista de nada, no podía leer a alguna mujer. Eran muy complicadas, muy independientes. Y se dedicó a escribir poemas en las paredes de mármol
Distancia
El quería hablarle, o escribirle. Pero quería que el silencio y la distancia los enamorara el uno del otro
Otras vidas
Querían desprenderse de amar mientras se hacían el amor. Quien lo diría, se habian amado en otras vidas
Hunza y la rosa blanca parlante
Hunza quería conocer a Alana. Conocerla de una manera verdadera. Hunza se identificaba con Alana, percibia que era sincera. Hunza le pidió al dios de la tierra y llego al bosque de las flores. Ahí se encontró con Alesha, la rosa blanca parlante. Alesha le dijo a Hunza que fuera despacio, que diera libertad a Alana. Alana se bañaba en el río desnuda, liberándose poco a poco del recuerdo y presencia de Ubor.
La mayoría
El Observaba mucho. Era alarmante las características de desórdenes mentales que exhibian muchas personas en la sociedad. Todos tenian algún grado de locura, pero era increíble como se reflejaba esta locura notablemente en la mayoría
viernes, 17 de febrero de 2017
Marlo, Karia y la pequeña Iris
Marlo era uno de los hermanos similares de Hunza. Marlo se había marchado por un tiempo a la cordillera de La Paz, en la frontera del agua y el fuego. Estaba acompañada de su amada, la princesa de las mariposas que solo le pertenecía a el. Ambos estaban visitando a Andere el Ángel, un sabio de 477 vidas. Alla con Andere aprenderian técnicas de sanacion, de transmutación y de telepatia para luego enseñarlas al pueblo Hunza. Por su parte Karia, la hermana similar de Hunza, estaba a cargo de la enseñanza de mantras tradicionales. Ella impartía sabiduria y gracia al pueblo Hunza. Karia esperaba ansiosa porque su hija hablara con más fluidez y pudiera hacer asanas. Su hija llamada Iris era un espíritu de 77 vidas y tenia ya mirada de sabia aun siendo una pequeña niña.
Hunza y la cautela
Hunza estudiaba a Alana. Le deleitaba su belleza, su voz y su mirada. La observaba y escuchaba. Cautelosamente lo hacia, cautelosamente la conocía
Vencer
He vencido al miedo, he vencido a la tristeza, he vencido a la soledad, he vencido a la necesidad, estoy intentando vencer a la impaciencia
Date y dame
Donde vas? Que buscas? Y si soy yo, y si eres tu? Date una oportunidad de saber, dame una oportunidad de saber
Revolucion
Revolucion pacifica pero activa. Revolucion silente. Revolucion de grito. Revolucion de lucha.
Hunza las encontraba
Hunza las encontraba a ellas acompañadas, o maltratadas, o molestas o ajenas. Esa era la dinámica por años de años
Hunza y Ubor
Hunza las hallaba sin buscarlas,,en laberintos de hielo y algas. Hunza atravesaba en canoa el río Msldito, ese de pirañas y escorpiones. Llevaba el puñal mostaza ese día para combatir a Ubor, el temible
Hunza y su tercer hijo
Hunza tenia un hijo llamado Kai y una hija llamada Sai. Su tercer hijo llamado Nai había sido asesinado por el jefe Yanef, de la tribu Daima proveniente del Himalaya occidental. Hunza esperaba por la reencarnacion de Nai algún día. Ya Hunza había cobrado venganza utilizando su puñal negro y rojo. Hunza no era vengativo pero no pudo perdonar en aquel momento y arrebato la vida a Yanef
jueves, 16 de febrero de 2017
Hunza extraña
Hunza se sentía mejor, mañana seria otro dia. Comería muy liviano. Hunza extrañaba a su amada
Hunza y el saco
En la noche, a eso de las 9:30, Hunza golpeaba el saco. El saco era su amigo y su enemigo. Hunza le daba repetidamente con guantes y sin guantes. Puños, patadas, rodillazos, codazos y filo de la mano daban de manera certera y veloz al saco. A corta y larga distancia lo azotaba, y Hunza movía el saco como un péndulo dejando que se le encimara y le diera para luego golpearlo violentamente. Hunza comenzaba lento y aceleraba el ritmo drásticamente. Los brujos y las brujas lo miraban con detenimiento y asombro y buscaban provocarlo de diversas maneras pero Hunza mantenia su concentración intacta. Hunza era experto en la pelea cuerpo a cuerpo y sus manos, codos y brazos eran los más rápidos del Himalaya
Hunza enfermo
La bruja del Pacífico meridional había envenenado a Hunza. algún alimento estaba afectado por ello y Hunza lo había ingerido. Hunza estaba intoxicado, se purgaba y vomitaba violentamente. Mañana debía tomar jugos verdes y yogur organico. Hunza estaba enfermo, debía sanar
Hunza y el tunel de los ciclones
Hunza llego al tunel de los ciclones. Era un túnel de miedo y misterio. No había vuelta atrás. Su vida dependía de cruzar ese túnel. Debía sumergirse en agua helada por 53 segundos y atravesar corrientes subterráneas violentas. Para llegar al bosque de las Flores y hallar a Alana, Hunza debía transitar este temido tunel
Llego
Ella vivia perdida, molesta, triste. Lo daba todo por perdido. Y llego el. El estaba triste, molesto y confundido. Y llego ella
Hunza y la maldad de los hechiceros
Hunza percibia la maldad de los brujos y brujas hechiceras. Tocaba su pulsera de cuentas de caoba y Bambu. Buscaba el silencio y cuidaba con recelo sus 7 puñsles en caso de ataque. En estos días, usaba el color verde esmeralda de filo cobrizo
Amor y alivio
Se vieron por primera vez en esta vida. Se miraron y se abrazaron, y sintieron amor y alivio
Hunza y Fen Yan Tun
Hunza visitó a Fen Tan Yui. Era un mistico convertido en comerciante y mercenario, chino argelino, Era conocedor de la magia blanca y la concentración extrema. Fen Tan Yui percibia al igual que Hunza. Ambos pensaron igual, dejar libre a Alana por unos dias
Hunza y el lago sereno
Hunza aquietaba las mentes con sus ojos azules cristalinos. Sus ojos eran espejos de un lago sereno
Hunza y ella
Hunza vivia atrapado en el tiempo. Soñaba estar con ella, haciéndole el amor a la hora que ella quisiera
Fúgate
Fúgate conmigo al bosque sereno, al río tenue, al mar risueño, al horizonte lejano. Fúgate conmigo sin decirlo a alguien
Capas
Capas de pelo, capas de bizcocho, capas de besos, capas de sexo, capas de pensamientos, capas de cielo
Hogar
Vivia para sus amigos, su trabajo, sus pasatiempos, su causa, su relación infiel. Y se olvidaba de su hogar
Limpia
Érase un mercenario, un pirata, un asesino, un crimínal en otras vidas. Y ahora simplemente limpia su karma en esta vida
Alana
Alana era pragmática, había sido traicionado por los dioses del meridiano del Himalaya. Habia sido traicionada por Ubor. Su vida era de ella, sin vacilaciones o expectativas. Alana era una flor rebelde, con sentimientos profundos y molestos
Espacio y deseo
Ella reclamaba espacio, el reclamaba deseo. Y cuando él le concedió su espacio, ella sintió el deseo
Amar
Amar y no sentirse atrapado. Amar y no controlar. Amar y dejar al otro ser libre. Amar sin pensar que estas amando
Sol
Senti un frio de muerte pequeña, ese frío que te llega al hueso. Salí afuera, procure al sol, y me abrigo con su luz
miércoles, 15 de febrero de 2017
Alana sana
Alana era un ser especial, que había sido trastocada por el temible Ubor. Debía sanar, poco a poco
Sin percatarse
Ella dormía soñando con el, sin percatarse. Mientras, a la distancia, el estaba despierto soñando con ella totalmente percatado
Hunza y la Diosa negra
Hunza tenia dos deseos. Acudió a la Diosa negra del Valle Purpura Perlado. El primer deseo; confiar en Alana. El segundo deseo: Que Alana confiara en Hunza
Loba en celo
Ella tenía instinto de loba en celo. El tenía instinto de lobo en busca de la loba en celo
Devorarla despacio
El no quería poseerla, ni quitarle su libertad y espacio. Solo quería escuchar su voz de día, y en la noche devorarla despacio
Comenzaron
A ella le habían despedazado el corazón. A el le habían despedazado el corazón. Se miraron a los ojos, y comenzaron a amarse
Cielo y deseo
Se abrazaron instintivamente. Hacia tiempo no se sentían. Sus cuerpos con ropa se tocaron. Y sintieron un poco de cielo y deseo
Hunza y su puñal blanco y turquesa
Hunza vio en Alana algo especial, distinto y verdadero. Pero era muy temprano para discernir y saber. Ya Hunza había sido engañado por las brujas de los Pirineos y del sur del Sur del Himalaya que simulaban sinceridad. Ante ello, Hunza guardaba prudencia y protegía su corazón con sus 7 puñales, siendo el de color blanco y turquesa el mas preciado
Alana, Hunza y el Túnel de los girasoles y jazmines
Alana había salido momentaneamente del bosque de las flores. Combatía al temible Ubor. Alana no tenía miedo, solo cautela. Ansiaba sentirse libre, volar como gaviota sin rumbo fijo. Alana conoció a Hunza en el túnel de los girasoles y los jazmines. Apenas se conocían y buscaban confiar el uno del otro de ser posible
Hunza y sus 88 vidas
Hunza era intenso. De alguna manera vivia en la frontera ilusa de la vida y la muerte. Podia discerner conciencias ajenas, calmar inquietudes de sus semejantes y absorber sus lamentos. Hunza no era ficticio, era un ser evolucionado que habia vivido 88 vidas con esta
Hunza y la cautela
Hunza discernía. La escuchaba, la sentia, con suma cautela. Ya Hunza había sido herido
Hunza y la luz verde sanadora
Hunza era un iman para la sanacion. A veces atraia espiritus perdidos. A veces atraia almas sensatas necesitadas. Hunza emanaba luz verde sanadora heredada de su madre.
Hunza , los números y las galaxias
A Hunza le gustaban los números, su forma, su simbología, su lugar exacto y definido en el universo, su particularidad y su individualidad, su modo singular de medir las distancias entre las galaxias
Hunza y el ambiente ajeno
Hunza vestía ropa ajena a el. Distinguía a algunos reencarnados. Eran guerreros enemigos y otros amigos. Escuchaba música extraña amplificada en sistemas de audio artificial. Extrañaba los tambores y flautas en vivo. Hunza siempre fue valiente, siempre fue Guerrero, es solo que vivía en un escenario ajeno
Hunza nace
Hunza nacio un día como hoy, al filo de la madrugada, cusndo los lobos aullaban buscando a las lobas, cuando los cuervos se escondían en la luz oscura de la noche
Hunza esquivo
Hunza era esquivo, simple, profundo y Guerrero. Era sensible pero experto en el combate cuerpo a cuerpo. Hunza nacía en la noche, cuando salen las estrellas. Hunza era esquivo, difícil que alguna pudiese atraparlo y tenerlo
Hunza, la convención y la merecedora
El bosque de las flores era uno de fantasia. Y pronto se efectuaría la convención anual. Todos los meses de febrero ocurría. Tres hormigas, cuatro duendes, siete ninfas, seis elefantes parlantes, catorce tigres, dieciséis tigresas, cincuenta hadas madrinas, setenta dioses y setenta y un diosas se reunirían. Convocarían a todas las flores y a todas las especies de flora y fauna. La reunión comenzaria en la fase de luna llena por siete días. Desde el anochecer hasta la salida del sol. Se comería siempre a las 3:27 am de la madrugada, y se cantarían mantras a las 6:17 am. La convención propondria las virtudes de las doncellas, las mujeres simples, las guerreras, las ninfomaniacas, las rebeldes, las sufridas, las intelectuales, las vanidosas, las honestas, las tatuadas, las Vírgenes, las divorciadas, las inseguras, las aristócratas, las bellas y las prostitutas. Se dilucidaría cual de ellas, si alguna, seria merecedora de Hunza
Luna silbando
Se sentía tranquilo, su mente se iba aquietando. Le hacia falta su compañia, pero vivia libre, como viento ligero. Buscaba espacios, silentes, familiares y frescos. Buscaba espacios, sin prisa, espacios de Luna silbando
Hunza se refugia
Hunza corria, estiraba su cuerpo, se refugiaba en el sol, la sombra, el salitrs y el mar
Hunza el taciturno
Hunza se había convertido en irreconocible, vacio y taciturno. Solo volvía a la vida cuando estaba con su hijo kai y su hija Sai. El sabia que no debía ser así, que debía ser alegre siempre, pero la vida de Guerrero se lo impedía
martes, 14 de febrero de 2017
Luz verde de sanacion
Ella le regalo su clitoris y su instinto animal de mujer a cambio de su luz verde de sanacion
Ni cuenta
Vivia molesta, ocupada, traumatizada, violenta, huraña, paranoide, sufrida. Y así le paso el amor de su vida por el lado, y ni se dio cuenta
Pasado planeta
Y se transporto al pasado, s lo que era saludable recordar. Y al hacerlo, se sintió libre, en otro planeta
Revolución
Hagamos una revolución agricola, una revolución natural, una revolución pacífica. Esa triunfara
Se quien eres
En este cuerpo relativamente joven han vivido 253 años. De verte se quien eres. De oir tu voz se quien eres. De escuchar tu libreto trillado de libros y teorias se quien eres. Se tu, y confiare en ti
Hunza primitivo
Hunza leía muy poco ya. Hunza no veía teñevision ni usaba tecnología. Hunza era un sabio primitivo, inmerso en el mar, el bosque y los ejercicios
Hunza, animal de presa
Hunza comia hojas verdes, vegetales crudos, queso seco, semillas, y algún alimento secreto, incluyendo chocolate oscuro. A veces, comia salmon ahumado crudo y se convertía en animal de presa por unos segundos
Hunza y las brujas
Hunza solo había conocido mujeres perversas, vanidosas. El sabia que habían otras de mejor corazón. Hasta ahora, solo brujas vestidas de oveja se habían acercado a Hunza
Hunza y la pelea
Hunza nació un día como mañana. Nadie lo celebraría, ni el. Hunza era insensiible, era nada sin ella. Era un guerrero, experto en la pelea de codos y filos de la mano.
lunes, 13 de febrero de 2017
Que va después
Pretender estar con ella por un rato. Mirarla a los ojos, escuchar su voz, ver su sonrisa. Y de ahi ver que va después
Poker de amor
Varias jugaban póker. La ganadora lo tendría, jugaban sus cartas. Serias, frías, calculadoras. Jugaban poker de amor, la ultima sentada a la mesa ganaría. Era un juego complicado, el con su dulzura y enigma podía asustar de momento. Podia crearles orgasmos insospechados mientras jugaban sus cartas. Era un juego de póker que ellas nunca habían jugado, y les gustaba. Todas querían ganar, y tenerlo de premio
Hunza y su ruta
Hunza las llevaba al extremo. Las entendía, las buscaba, las interrogaba, las confundía. Hunza caminaba su propia ruta
Hunza era algo mas
Hunza no solo era Guerrero, no solo usaba puños y codazos letales. No solo era diestro utilizando sus puñales en el combate. Ese no era realmente Hunza. Ese solo era aquel que defendía a su pueblo, a sus amigos y a su hijo Kai y a su hija Sai. Hunza era brujo, había aprendido magia hechicera. Era vidente, podía predecir el futuro. Percibia auras, y buenas y malas vibraciones. Percibia lujuria mal enfocada. Percibia el encanto de la mujer deseada. Percibia a sus amigos contados con los dedos de ambas manos. Percibia a su hermano similar y su hermana similar. Percibia la protección de los espíritus del mas allá
Actitud
Cambia tu actitud, no vayas en contra del tiempo, o de la emocion. Y el mundo se va transformando
domingo, 12 de febrero de 2017
Hunza, Alana y las dos fotos
Hunza y Alana habían sido amantes en su última vida. Estaban prestos a casarse. Y en esa vida, Hunza fue asesinado en una batalla. Un mensajero llevo una carta y una foto de Hunza a Alana. Por su parte, Hunza apretó contra su corazón una foto de Alana antes de morir. Y esas dos fotos vivían en esta nueva vida de ambos
Alana, la gazela
Alana era silenciosa. Se sumergia en las flores. Amaba el mar. Corria como gazela. Era libre. Era ella
Hunza y su destino
Hunza se había refugiado en un castillo. Era un momento de retiro. Pensaba en ella en las madrugadas, en Alana. Apenas la conocía, y pensaba en ella a veces. Pero Hunza estaba prevenido. Sabia que las brujas perversas tomaban rostros bellos para confundirlo y destruirlo. Hunza había aprendido su lección y ya no sería presa. Su destino era otro.
Hunza y los espíritus del otro mundo
Hunza era solitario, ajeno. Era amigo de los espejos, de la ola salvaje. Hunza no precisaba tiempo, ni limite. Hunza buscaba el peligro, la cobija del bambu. Hunza comia crudo, y se conectaba con los espiritus del otro mundo
Hunza y sus contrastes
Hunza vivia al extremo, vivia entre la vida y la muerte. Era un guerrero temerario, sin piedad en la guerra. Sus 7 puñales habían matado muchos hombres, esa era la ley de la guerra, sobrevivir. Hunza tenía un código de honor, perdonaba la vida muchas veces, solo mataba cuando veía odio en el rostro del enemigo. Hunza era sensible, amaba la música, el opio y a su amada. Hunza vivia al extremo, era hijo de los lobos y los cuervos del Himalaya del Norte
Erase
Érase el y ella. Separados, distantes, en un mundo tecnológico y robótico. El y ella, separados por las ramas de los arboles, por los insolentes curiosos. Erase el y ella, nunca juntos, queriendo estarlo
Hunza y la noche
Hunza se refugiaba en sus carreras en la noche. Iba al mar de noche. Pensaba en ella de noche. Hunza comenzaba a vivir, en la noche
sábado, 11 de febrero de 2017
Hunza y los girasoles
Hunza pretendia enamorar a Alana y ser amigo de su hermana Amanda. Eso si las encontraba en el bosque de las Flores, donde ellas se escondían entre azucenas, rosas rojas y girasoles
Levantar la mirada
Eran silentes, de una manera extraña, quizás reprimida. Quizás la vida las había llevado a eso, algún maltrato indebido. Quedaba de ellas levantar la vista, confiar en quien se lo gane, y saber que no todo el mundo es igual
Hunza se arriesga
Hunza llego al bosque de las flores. Era un camino de dificultad, de truenos, de arena movediza, de brujas parlantes y silentes. Hunza ya no definia por nombre a su amada raptada. El ultimo nombre que definió se llamo Jazmín, una mujer de pelo corto y cuerpo hermoso blanco, caderas pronunciadas y sonrisa de perla. Hunza llego al bosque de las flores, su puñal ese día era el plateado y rojo, para protegerse de los cerdos salvajes de esa parte del Himalaya. Hunza no buscaba oro ni alhajas, buscaba a su amada, esa que cambiaba de nombres, de caras. Hunza arriesgaba su vida para encontrarla
Breves textos
Ella se desaparecía de momento, sin dejar pista. Y el la buscaba en su recuerdo, en lo secreto, en las fotos, en los breves textos
Pronto
A las 11 pm el y ella se encontraban a la distancia. Eran amigos y querían ser amantes, pronto
La imperfecta
Ella era la amante perfecta, interesada en el, disponible y risueña. Y el ni caso le hacia, preferia a la imperfecta
Hunza y los dragones
Hunza hacia movimientos de mono, ante la luna persignada y fria. Hunza cerraba los ojos, pensaba en ella sin buscar enamorarse. Hunza buscaba la brisa, iba al mar de noche, le hablaba a las estrellas. Hunza velaba de cerca y con celo sus 7 puñales, ante el asecho de los dragones del Himalaya del este
Hunza, ellas y los orgasmos
Hunza pretendia llegar a las mentes de ellas. No quería fijarse en la mente de una sola mujer. Lo había pretendido y era peligroso. Ahora solo les hablaba, contemplaba su torso, sus senos, contemplaba la compañía de aquella que llegara de paso. Hunza las comprendía, les hablaba despacio y las escuchaba. Ellas sentían orgasmos. Hunza solo les hablaba, a veces les rozaba los dedos de la mano, y ellas sentían orgasmos
Pais magico
Deja ir, deja salir de momento la palabra grosera, que salga el enfado, la rabia. Pero vuelve a tu centro, a tu norte, a tu vuelo al país mágico
Hunza y las señales claras
Hunza fue amante de 7 sirenas. Había vivido en el Oceano Indico. Hunza no sabia como contactar a Alana. No sabia si Alana era aún compañera del temible Ubor. Hunza era un guerrero pero tenía honra. No cortejaba mujeres ajenas a menos que ya estuviesen solas y no acompañadas. Hunza necesitaba señales claras de Alana para actuar. Si no continuaría su camino solo
Hunza, el miedo y la huida
Hunza daba mensajes claros a su amada. Sabia que había riesgos, el hablar directo trae riesgos de huida. Ya lo había experimentado con muchas, miedo y huida
Hunza vuela a Allana
Hunza cortejaba a varias mujeres, ya la soledad era extrema. Muchas mujeres eran bellas pero llanas Y la mente de Hunza volaba a Alana
Cavernicola
Ella se considera feminista, libre y sensata. Pero vivia presa de un machista cavernícola
Sin explicación
Eran hermosas y descontentas en sus relaciones con ellos. No tenían comunicacion ni se amaban. Y permanecían juntos por razones sin explicación
viernes, 10 de febrero de 2017
Fotos y mensajes de texto
Nos hemos convertido en avatars, robots, presos de la comunicación cibernetica, sin palabras habladas, sin tacto, sin sentimientos observados cara a cara, sin rostros sonriendo a un pie de distancia entre ellos. Nos hemos convertido en fotos y mensajes de texto.
Mediocres
El juego de la seduccion era cuesta arriba, imposible, una broma pesada a su ultima potencia. Solo los mediocres lo entendían
Simple café
El vivia en un mundo complejo, de conflictos y luchas. Y detrás de ello, en la simpleza de la vida, la invito a tomarse un simple café
Belleza interna
A el la belleza externa de la mujer le atraia pero no lo llenaba. Esa belleza externa vanidosa, aburrida y seductora. A el le llenaba la entrega, la belleza interna, la sonrisa genuina.
Almas que se buscan
El disimulaba, ella también, no se habían visto ni mirado en persona. Se conocían muy poco, apenas. Y sus almas se buscaban lenta y consistentemente
Quizás
Vamos a suponer que te gusta. Te gusta la cara, quizás el cuerpo. Te gusta, y entonces? Así pasa mucho, se gustan, se acuestan, se casan, tienen hijos y se separan. Y porque eso pasa? Es evitable, es necesario, es recomendable, es normal? Quizás no se sabe, quizás es la ley de la vida, gustarse y dejar de gustarse. Quizás algunos trascienden al mero gustarse, se atreven a subir mas peldaños, se adentran, se aventuran, se consideran, se liberan, se esconden uno del otro, se separan, se juntan, se respetan, se dan la vida, se aman. Quizás son pocos, los que lo logran
Hora
11:37, hora critica. Hora que la desea, hora que lo desea. Hora que no están juntos. Hora que miran sus fotos. Hora que se dan placer
Hunza y el collar de caoba
Hunza se adentraba en su mundo. Por unos dias compartía con Kai su hijo y Sai su hija. Escuchaban música y conversaban, se reían. En la noche Hunza los dormia. Luego les colocaba un collar de madera de caoba que servía de protección contra los brujos y brujas del Himalaya de Oriente. Esos brujas y brujas eran perversas, tenían cuatro ojos, dos mentes y manos de tentáculos de pulpo. Hunza era vigilante, pronto partiría a la guerra nuevamente, llevando consigo a sus dos perros lobos y sus siete puñales.
Que se yo
Érase una era extraña y perversa. Donde estaban juntos de manera inadecuada. Era un universo confundido que provocaba relaciones forzadas, de sonrisas a medias. Eran relaciones que empezaban bien y se iban aguando, donde se quiere pero no se ama, donde se mantienen por conveniencia o por el que se yo.
Alana se gratifica
Alana era una mujer muy espiritual y muy sexual. Hunza también. Alana vivia en el bosque de las flores, olía rosas y jazmines. Mientras lo hacia, ella misma se hacia el amor. Alana había visto dibujos y escritos de Hunza y mientras se gratificaba, pensaba en el.
Hunza corre
Hunza corre. No corre por competir, compite contra el, contra su estamina y espiritu. Le gusta correr en asfalto, en tierra, escuchar el sonido de ella cuando pisa. Hunza prefiere correr solo, sin personas presentes. Cuando corre solo se encuentra, se escucha. Cuando corre, oye los grillos y mira la luna llena si existe en ese momento. Hunza comienza corriendo lento, sin prisa, hace pausas a veces, va incrementando el ritmo. Siente sus brazos, su abdomen que contrae, siente sus piernas. Hunza corre para sentirse libre, para fortalecer su cuerpo y transportarse a mundos astrales por un rato
Hunza ignora
Hunza ignoraba la hostilidad del mundo moderno. Debía hacerlo para evitar usar su fuerza de Guerrero y hacer daño.
Hunza y su familia
Hunza tenía poca familia. Sus hijos Kai y Sai. Su hermano similar, su hermana similar, dos perras, los niños misteriosos, y la soledad
Hunza y su reencuentro
Hunza llego a la aldea y se reunió con su hijo Kai y su hija Sai. Hacia 43 días que no se veían, Hunza había estado en otra guerra. Se encontraron otra vez entre besos y abrazos. Kai le preguntaba y bromeaba. Hunza les preguntaba y hablaba. Sai sonreía y dormia. Hunza los llevo a la escuela de la aldea y conoció a niños compañeros de salón de Sai. Hunza hablo con ellos, era una inocencia muy distinta a la que experimentaba en la guerra. Era paz y felicidad por unos instantes
jueves, 9 de febrero de 2017
Hunza y el reencuentro
Comenzaba la madrugada y ya Hunza sentia el peso del día, y el sueño llegaba. Y también sentia ese ímpetu del encuentro de volver a ver a su hijo Kai y a su hija Sai, luego de estar 43 días en una dura batalla contra los macedonios, la cual ganó
Hunza y su adaptación
Y asi transcurrían los días. Hunza era un guerrero primitivo reencarnado en un mundo moderno ajeno a el. Hunza corria caballos salvajes en su lugar de origen y ahora guiaba automóviles hechos de chatarra estilizada. Hunza ingeria vegetsles crudos, se alimentaba de frutos secos y queso de cabra y se bañaba en las aguas heladas de los ríos existentes en los montes del Himalaya. De alguna forma Hunza debía recrear su vida antigua en esta vida presente y no era fácil para el. Hunza debía meditar y recobrar su memoria y recordar el nombre y rostro de su amada quien fue raptada. Hunza debía seguir sudando, haciendo continuos ejercicios, katas y asanas para asi sacar de su cuerpo el veneno que le fue inyectado por los raptores. Hunza debe vivir día a día, dejando ir, visitando el mar
Hunza, Alana y el bosque de las flores
Hunza conocio a Alana. Alana era amante de las flores y la libertad. Era hermosa, de pelo negro salvaje y sonrisa amplía. Alana tenia una hermana, Amanda, igualmente bella. Alana y Amanda se guardaban secretos, no eran gemelas pero como si lo fueran. Vivían del misterio y del silencio selectivo. Alana tenía un hijo llamado Yan que era aún pequeño, acababa de nacer. Alana era esposa de un guerrero llamado Ubor que era temible y destructor ante el enemigo. Ubor y Alana no congeniaban ya que Ubor era dominante y controlador. Alana estaba huyendo de Ubor, y se interno en el bosque de las flores, atemorizada ante la presencia de Ubor. Amanda sentia todo el temor que sentía Alana, ya que era muy unida al alma de su hermana. Hunza no confiaba, pero quería conocer a Alana cuando ya no estuviese atemorizada y escondida en el bosque de las flores
Hunza y el deseo
Hunza era deseado por muchas mujeres. Deseaban su cuerpo y su mente. Hunza deseaba muchas mujeres. Pero para Hunza el deseo era solo eso, deseo. Y el deseo no tenía sustancia. Hunza era un guerrero, y el deseo era una distracción pasajera. Hunza necesitaba no solo deseo y sexo, sino alguna amada que lo recibiera con amor cuando llegara de cada batalla. Y a su vez, que lo dejara ser libre, como el viento y como Guerrero que era
Hunza y el agua helada
Hunza nuevamente volvió a sus instintos, al silencio, a observar. Mañana volvería a la aldea y se reuniría con su hijo y su hija. Hunza volvía a ser humano por un rato, para luego convertirse nuevamente en agua helada.
Mar insólito
Era un mar insólito. De gente dispersa en sus pensamientos. Cada cual flotaba en su propia ola, en ese mar insólito de primavera
miércoles, 8 de febrero de 2017
Hunza percibia
Hunza vivia a medias en la confianza hacia los demás. De mirar, percibia. Y sin mirar, percibia
Hunza y Naida
Naida enamoro en algún momento a Hunza. Naida era buena pero mala. Era pequeña, flexible, de nariz aguileña, boca y ojos pequeños. Era bella a su manera, seductora y destructiva. Tenía 6 puñales de diversos tonos de rosa y rojo. Naida tenía alma a veces y a veces no la tenía. Era vengativa, era guerrera y acróbata. En la guerra, era combativa y tenaz, era de las pocas mujeres que peleaban contra los hombres y había matado a 473 hombres en todas sus vidas. Hunza se alejo de Naida, era demasiado peligrosa para ser amada en este momento.
La ruta
Donde voy, en que ruta nos encontramos? Hace años era distinto, la ruta era más predecible, menos confusa. Esa ruta es una, aunque parezcan muchas. Queda calmar la mente y discernir
Lao Sun y Rai
Rai y Lao Sun se reunieron. Eran complices de la paz y la guerra. Rai tenía 7 caballos y era experto jinete. Dominaba el arco y la flecha. Sus flechas tenían letal veneno. Rai usaba opio antes de las batallas y se iba en transe antes de combatir. Lao Sun era experto en el combate cuerpo a cuerpo y siempre tenía en su cuerpo tres de sus once puñales. Lao Sun se sonreía pero era peligroso, como esas serpientes que asechan y de momento atacan.
martes, 7 de febrero de 2017
Hunza y Kaina
Hunza pretendia a varias mujeres, no sabia cual era su amada ya que los raptores le inyectaron un veneno que borro su memoria. Una de las mujeres era Kaina, mujer alta, voluptuosa, de senos pequeños. Kaina era de piel color tierra, de pelo abundante y rizado. Kaina era brillante, sensible, molesta y combativa. Hunza soñaba con Kaina, con hacerle el amor de manera primitiva
Hunza y Maika
Hunza partio a meditar al bosque. Allí estaba Maika, la princesa solitaria del bosque. Ella bailaba con las mariposas. Maika era risueña y espiritual, amiga de dar largas leccionee. A Maika la pretendia Rai, el hermano similar de Hunza. Hunza y Maika hablaron de sus viajes, de la familia y del baile. Hunza partio y se teletransporto hacia una de las mujeres que quería conocer.
Atrajese
Aun no te conocía en persona, pero conocia parte de su mente. Y eso era razón para que le atrajese
Hunza escucha a Lao Sun, el mandarín
Hunza acudió a Lao Sun, el mandarín dueño de 11 puñales. Hablaron, y el mandarin le dijo que escogiera la luz o la oscuridad. Le recomendó la luz, vivir plenamente, dar y ser lo mejor que pueda ser. Y Hunza escucho.
Engaño, para ambos
Era linda, con cierto enigma, interesante. Pero no era su tipo, no le gustaba lo suficiente. Seria un engaño, para ambos
Hunza no confía
Hunza era distinto. Tenía educación formal en este cuerpo reencarnado. Pero actuaba a base de instintos,,intuición y percepcion. Actuaba acorde con dilemas y dicotomías. Hunza debía escudriñar y decidir día a día. Hunza era presa difícil, se escondía cerca del mar y en un lago magico y escondido. Hunza apenas hablaba, confiando sus sentimientos a nadie
lunes, 6 de febrero de 2017
Hunza se protege
Hunza había sido herido por una mujer sin escrúpulos ni vida. Esto habia endurecido a Hunza. Hunza pedía consejo y sabia que no debía confiar de quien se lo ofreciera. Hunza estaba prevenido, contemplaba, se ejercitaba, iba al mar, rezaba a la Virgen de la Rosa Mistica. Hunza limpiaba sus siete puñales, siendo el negro y rojo su preferido. Su corazón estaba protegido por esos siete puñales, especialmente por el preferido
Limpieza de dientes
Se supone que el sexo una a dos almas, que sea un acto natural y sublime. Para muchos, es un mero acto animal y de rutina, similar a una limpieza de dientes mañanera.
Amigo
Simulaba ser ingenuo. Pero a fuerza de golpes sabia que la peor msldad puede provenir de quien piensas puede ser tu mejor amigo
4 días y medio
Veia a sus hijos 4 días y medio al mes. Era feliz. Los otros 26 días vivia más allá de la luna
En nada
De que te vale intercambiar saliva, semen y sudor cuando le haces el amor si al final todo queda en nada
Buscándome
El la cortejaba incesantemente. Se había enamorado de ella. Ella lo escuchaba pero miraba hacia al lado buscándome
Hunza y la traición
Hunza no confiaba ni en amigos o enemigos. En 88 vidas había sido traicionado 4,777 veces. Había sido matado por traición 593 veces. Hunza meditaba y hacia pranayama para olvidar la traición. Pero vivia vigilante ante ella
Arisca y deseosa
Por el día era arisca, rechazaba el sexo. Por la noche estaba hambrienta, deseosa por el sexo
Bruja profunda
Puedes ser hermosa y bella, simpática, una buena mujer. Pero necesito una bruja profunda, de aire de misterio, de ese misterio que acaricia y no hace daño. Un brujo solo puede estar con una bruja profunda
Hunza y las varias mujeres
Hunza comenzaba a teletransportarse, creaba poderes. La fijación en su amada había cesado, habían varias mujeres de diversos tipos. Cada una trataba de seducirlo de diversas formas. Hunza era libre, Guerrero, no le gustaba sentirse poseído
Lao Sun y su trenza
Lao Sun era un mandarín actobatico. Inmerso en la lectura y el auto descubrimiento. Hunza y el mandarín se conocieron en una batalla. Intercambiaron puñales. Lao Sun le regalo el color mostaza. Hunza le regalo uno color verde tenue. El mandarín a veces se comunicaba telepáticamente, a veces mediante sueños. A veces su trenza larga rojiza fue un arma, utilizándola como una cobra en cuellos enemigos durante las batallas.
Rai
Rai se escondía en algunas épocas. Era huraño, secreto. Le gustaba el olor a hierba y el agua fría. Rai poseía gatos negros, 11 en total. Rai estaba marcado por tatuajes de dragones y leones, símbolo del fuego y la guerra
Encadenada
Se refugiaba en la pantalla del movil, encadenada, timida, silente, abacorada por el disparate, lejana al amor real
Conectsdos
Si estamos todos conectsdos con el universo, estoy conectado a los maleantes y desgraciados, s los desalmados?
Duende pequeño
Érase un duende pequeño que deseaba ser grande. Pidio el deseo de ser grande y gigantesco. Y al verse grande, deseo ser pequeño otra vez
Jugar con ella misma
Cada vez que llovía a ella le placía quitarse su ropa interior y jugar con ella misma
Silencios
Eran unos silencios inconclusos, con sabor a viento, cálidos, tibios, súbitos, medidos y sentidos por las olas
domingo, 5 de febrero de 2017
Brutalidad
Quizás debo comenzar a reconocer que hay diversas manifestaciones de brutalidad tanto masculinas como femeninas
Soplo de alientto
Que somos sino una sombra de la espera, un reflejo retrasado del viento, una búsqueda marchando en zig zag, un soplo de aliento
Cual mar
Oye, en que mar te sumerges? Hay varios sabes. Esta el mar tempestuoso, bravio, incolume, de espiritu inmisericorde. Esta el mar traicionero, de resaca rabiosa, de algas multiplicadas en miles. Y esta el mar tenue, suave, cristalino, misericordioso, amigo
Miradas
Tengo modos y pensamientos. Comparto en ocasiones. Muchas veces guardo silencio, y entro a mi mundo. Escucho las conversaciones, continuas y disímiles, exageradas. Y percibo las miradas incisivas, intrusas, molestosas, majaderas, intrusas
500 palabras
Bebieron, se le acerco, con la labia le dijo 500 palabras en 10 minutos, la sedujo, de extraños fueron íntimos, le hecho el brazo, la penetro, se olvidaron
sábado, 4 de febrero de 2017
Hunza y el mounstro tatuado
Hunza viaja en la noche, arriesgando su espíritu. Navega entre sigilosas circunstancias, entre humo enemigo, entre gente intoxicada. Hunza no entiende en que plano vive, se entretiene en un riesgo incomodo, en un mundo que lo acompaña por un rato, antes de volver al plano normal. Entra a un mundo de grafitti sicodelico, se aturde, se hace amigo de un mounstro tatuado y continúa su marcha.
Hunza y la música negra
Hunza recorría calles angostas y de ladrillos. Miraba atónito y confundido. Llego a una plaza donde gente de raza negra tocaba tambores y repetía mantras. Era lo mas cercano a su aldea de origen. Sentia su corazón vibrar, sentia vida plena por un instante pero permanecia inexpresivo como Guerrero Hunza que era
Hunza y la música
Hunza atravesaba las paredes del tiempo, y al así hacerlo debía adaptarse al mar y al cielo del mundo moderno. Hunza debía entender su medio ambiente actual que no le era natural. Hunza escuchaba música sin entender las letras ni los instrumentos. Se distraía con esta música pero no sabia su significado real. Era música distinta a la que escuchaba en otras vidas. Allá en su lugar de origen en la frontera de la cordillera entre India y Afganistan, la música se basaba en los acordes de tambores, flautas y mantras. Era muy distinta.
Hunza conoce al mandarín
Hunza y el mandarín se reunieron. El mandarín era legendario con cuerpo joven. El mandarín usaba artefactos ajenos a Hunza que grababan katas extrañas realizadas por Hinza. Las katas eran extrañas para el mandarín. El mandarín era experto acróbata y todo lo veia positivo. En la interaccion se iban conociendo. Hunza vivia de día a día, entendiendo poco a poco lo que sucedía
Transcurren
Las cosas suceden despacio, sin prisa. El mejor orgasmo y eyaculacion transcurren cuando no hay prisa
Camino
Jamás intento imponerme. No es mi estilo ni mi intención. A cientos he dejado volar libres. Si quieres venir vienes, si quieres quedarte te quedas, si quieres marcharte, el camino es amplio y seguro
Sin saber porque
Se levantaba de madrugada, pensando en alguna mujer de temporada. A esa particular mujer la pretendia pero ella era inalcanzable y era inaccesible. El escribia sobre ella y para ella sin saber porque. Era un ejercicio inutil y sin sentido. La pretendia sin saber porque. Solo sucedía
viernes, 3 de febrero de 2017
Hunza y los sueños
Hunza entraba a un mundo mágico. De sabiduria innata, de crear espacios en el firmamento. De crear sueñus cercanos.
Cara a cara
No se que pensar. Son juegos que no se entienden. Comunicacion cibernética ajena que jamás sustuira un encuentro cara a cara.
Hablando sin saber
Se imaginan frente a frente. Hablando sin saber de que hablar. Tomando un sorbo de cafe. Lo saborean, se deleitan. Hablan sin saber de que hablar. El la mira a los ojos y le mira el alma. Y ella también. Y se gustan
Nadie
Ella contestaría o permaneceria en silencio? El esperaba sin apego. Entenderia si no respondiese. Pero, queria conocerla. A su vez, nadie podía obligarla a contestar, nadie
Pedazos rústicos
El escribi al punto de la casi inconciencía, del delirio y el sueño profundo, hilvanado en pedazos rústicos
Todavía
Todavía esperaba una contestación a su invitación de tomar café. Todavía ella lo estaba pensando
Extraño
Ella leía lo que el escribia. y el lo sabia y nada le decía. Y sin conocerse apenas, se gustaban y se sentían. Era extraño y era insólito
Hunza, sus puños y codos
Hunza caminaba lento, simulando ser indefenso y sumiso. Y detrás de ello, había una fuerza destructiva. Puños de acero que viajaban a velocidad excesiva, ataque de codos de relámpagos asesinos
Critica y equidad
No es cuestión de ataques personales u ofensivos. Pero el mismo derecho que tiene una mujer de criticar a un hombre lo tiene un hombre de criticar a una mujer. Se llama igualdad y equidad. Y el respeto en la crítica es primordial
De que me vale
A ella, de que le vale la belleza si no tiene sensibilidad y sencillez. De que le vsle si nunca ha luchado y sobrepasado real dificultad. De que le vale si no tiene madurez
Hunza y su familia
Hunza tenía dos hijos, Kai, el varon, y Zai, la hembra. Kai nació en enero y Zai en abril. No tenían edad. Kai era intenso y Guerrero como su padre. Leía mucho, analizaba todo. Zai era soñadora, silente como su padre, sensible como su abuela Sofia. Rai, el hermano similar de Hunza,era experto jinete y esgrimista. En la guerra usaba un sable de hierro de color púrpura intenso. Sai,su hermana, hipnotizaba a las personas. Hablaba de una manera particular, para que no la entendiesen. Era experta en los hechizos para cspturar a los que pretendían hacerle mal al pueblo hunza.
Hunza y sus tatuajes
Hunza no tenía vinculos reales. Vivia solo de día a día. Su conversación mayor era con su mente, con sus demonios internos y el guerrero continuo. Hunza se tatuaría nuevamente la espslda, en un tiempo prudente, creando el símbolo de su pueblo de origen en su espalda
Hunza y lo que fue
Hunza estaba cansado.,era una rutina, una repetición absurda y repetitiva. La misma historia. Hunza solo podía sentir el silencio. Ignorar la ignorancia y esperar al día que reencarnaría en lo que fue en un pasado
Hunza prepara sus 7 puñales
Hunza tenía 7 puñales. Dorado y negro. Azul Aqua. Rosado y amarillo. Marron y verde. Plateado y rojo. Blanco. Mostaza. Eran puñales de arte, de mil generaciones, de guerras, de muerte, de vida, de honra, de todo y de nada. Hunza los llevaba en su mochila y en el lago los limpiaba. Practicaba el uso de ellos y asi estar listo para la batalla y el enfrentamiento enemigo
Palabra inexistente
La locura y la cordura no existen. Se interlazan constantemente y crean una palabra inexistente
Hunza y el lago
Hunza hoy destilaba veneno. Debía ir al lago. Su humor no era el mejor. Debía refugiarse y aislarse del mundo por un rato. Sentia traición e indiferencia por todos lados. El lago lo calmaría
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