15

Ante la mirada lejana de Su Señoría, la madre serena al menos en apariencia, la fiscal saboreando a su presa, en espera del cuerpo juvenil que carga esos 15.  Camina, perdido en el pasillo frío, encadenado, recordando a Kunta Kinte, esos 15 que piden la bendición a su madre, en espera de la Sentencia.  3 años de Sentencia, quizás augurio de más, todo por tomar lo ajeno, de robar  plástico transformado en pleistaizon, con armas largas en mano junto a la juntilla, intimidando, en viaje pulverizante de droga barata, en ese viaje de fantasia, que hace el robo una maravilla y hace que esos 15 se conviertan en 45.  Esos 15 años, de quinceañero casi matón, que el sistema quiere absorber y almorzar, que busca rumbo, salir de esas cadenas, y tratar de ser libre otra vez. El tiempo dirá.

Oso grizzly

Es perezoso y siempre quiere su miel.  Camina sigiloso, solo, muy solo.  Con cara de bobo, caminar lento y atontado.  Peludo, regordete y egoista.  Ante la duda, se levanta, abre sus fauces y se para en dos patas.  Se torna agresivo, descontrolado, belicoso.  Ese oso grizzly, de gigante gentil a mounstro trasnochado, empachado e inconforme.  Ese oso grizzly,  ¿conoces alguno?

Pink

Ese color sublime, femenino, gracioso, sinónimo de suavidad, de nena.  Primer nombre de Floyd, el de Comfortably Numb.  Ese pink, el favorito de mi hija y de ellas, color del uniforme de Pantana, el mejor ciclista italiano de todos los tiempos.  Pink, nombre de la artista pop rebelde, fusion del rojo y blanco, eternamente pink.

Alma

Esa nota pasajera, que se mezcla en tu lienzo, que intercala con ese tambor agresivo, con esa que baila, con ese ruido de voces que enloquece, ante el indio amazónico que irradia.  Tonos que llegan, colores en el alma, en esa alma que me salva.

Lados

Muéstrame tu lado perfecto, ese lado sutil, que embriaga y seduce.  Ese lado de tu corteza, de esa entereza que irradias, ese lado sereno, contemplativo, que sin darme cuenta se traduce, y se convierte en esencia sensual, que igualmente cautiva, de un lado contrapuesto al otro, cambiando mi alma, convirtiéndola en ceniza, y se convierte en tuya.

Vivir

Ese miedo que te absorbe cuando me ves, que te hace correr, de no querer mirar, absorta en tus pensamientos, de aquel que se fue, que ya no existe, de ese que te castigó, que no soy yo, que solo es él.  Ese miedo que evita que sonrías con libertad, que crea nerviosimo en ti, al estar cerca de mi.  Ese miedo que no debe existir, que debe morir, y renacer en aguas dulces, vibrantes, de soles inmensos, que te hagan vivir, otra vez, junto a mi.

Luz compartida

Dónde es ese espacio comfortante, donde te hayo, donde no hay secretos, donde te toco sin reparos, sin suprimir deseos. Ese espacio eterno, de minutos y horas, donde deslizo mis manos, traviesas, donde el cielo baja a la tierra, donde somos uno por instantes mágicos, donde se  transciende a la lógica aburrida, donde tu sonrisa pícara hechiza.  Es ese momento que llega, a la luz de la luna llena, en esa amalgama de sentidos, que flechan, que inundan, que nos hacen nada, a la luz de ese éxtasis compartido.